Los cementerios son lugares extrañamente fascinantes para muchas personas. Mientras más antiguo, tanto mejor. Puede que sea la historia detrás de estos lugares que despierta nuestra curiosidad, o nuestra admiración por algunas de las figuras que descansan en los más famosos del mundo; o simplemente encontremos interesante el diseño de algunos mausoleos, que van de lo lo elegante o lo verdaderamente extravagante. Lo cierto es que no son pocos los cementerios alrededor del mundo que se han convertido en atracciones turísticas.

¿Cuántos de estos conoces?

Pere Lachaise – Paris

Si vamos a hablar de cementerios, es mejor comenzar a lo grande. Pere Lachaise es probablemente el cementerio más famoso del mundo, algo notable cuando consideramos que tan solo en París también se encuentran el cementerio de Montparnasse y el de Montmartre, dos campos santos famosos por mérito propio.

Tomando en cuenta la historia de París, no es sorpresa que en Pere Lachaise descansen algunas de los personajes más importantes de la historia francesa, y mundial. Chopin, Moliere, Rossini, Maria Callas, Jim Morrison son solo de algunos de los históricos residentes de Pere Lachaise, aunque sin duda la tumba más famosa como icónica es la del escritor y poeta irlandés Oscar Wilde, hasta hace relativamente poco cubierta de marcas de besos dejadas por los visitantes.

Cementerio La Recoleta – Buenos Aires

Buenos Aires es una ciudad llena de atracciones: Avenida Corrientes, Caminito, San Telmo y claro, el cementerio de la Recoleta. Si bien el también famoso Cementerio de La Chacarita es más grande, el de La Recoleta es el más conocido de la ciudad. No es casual, considerando los impresionantes mausoleos y la lista de notables que descansan en su suelo, encabezados por Evita Perón, una de las figuras más conocidas de la historia argentina, inmortalizada en el musical de Broadway que lleva su nombre. Claro, que esté ubicado en el núcleo de uno de los vecindarios más turísticos, en una zona con notable vida nocturna y lugares de esparcimiento, también ayuda a hacer de La Recoleta un destino fijo para los visitantes de Buenos Aires.

La Abadía de Westminster – Londres

Sí, técnicamente no es un cementerio, pero si estamos hablando de históricos y famosos, quizás podríamos hacer un artículo dedicado a la Abadía de Westminster exclusivamente. Uno de las atracciones turísticas más conocidas de Lonres, Westminster desborda historia en cada centímetro, y esto lo decimos en sentido casi literal. Geoffrey Chaucer, Charles Darwin, Isaac Newton, Rudyard Kipling, Alfred Tennison, sin comenzar a mencionar a los reyes, reinas y consortes que descansan aquí, Westminster es una lección de historia sobre el imperio británico y en cierta medida, de occidente. La tumba más destacada, de nuevo literalmente, es la Tumba del Guerrero Desconocido, monumento a los soldados desconocidos de la Primera Guerra Mundial, y única tumba de toda la Abadía sobre la cual, específicamente, no se puede caminar.

Ciudad de los Muertos – Cairo

La Ciudad de los Muertos en Cairo es un lugar… paradójico. Su origen como necrópolis, que se remonta hasta el siglo VII, contrasta con su carácter actual de vecindario. Sí, vecindario.

Producto de las migraciones urbanas debido a la modernización e industrialización de Cairo, la Ciudad de los Muertos es hoy un sitio bastante vivo, cientos de miles de personas que conviven con las tumbas de sus ancestros, viviendas junto a mausoleos, actividad y vida en medio del lugar de descanso eterno de muchos.

Cementerio Nacional de Arlington – Estados Unidos

Uno de los espacios de mayor solemnidad y respeto en todos los Estados Unidos, el Cementerio Nacional de Arlington.  En él descansan aproximadamente 400.000 personas, incluyendo el presidente John F. Kennedy, sus hermanos Robert y Ted, además de su esposa Jacqueline. Uno de los espacios más destacados del cementerio es la Tumba del Soldado Desconocido, que alberga restos de soldados de la Primera y Segunda Guerra Mundial, y de la Guerra de Corea. En este espacio también se puede observar el Cambio de Guardia, una ceremonia llena de símbolos y precisión que honra constantemente a los soldados enterrados en la tumba. Un detalle importante si visitas Arlington es su estricto código de silencio y respeto a las normas y a la solemnidad del espacio.